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Notice d'autorité
Palomo Cruz, Alberto Jesús
Personne · Málaga, 1962

Alberto Jesús Palomo Cruz (Málaga, 1962) presta sus servicios como auxiliar del Archivo Histórico de la Catedral de Málaga, donde además forma parte de la plantilla laboral del templo desde hace más de tres décadas. Divulgador de la historia local es autor de los libros: La Catedral de Málaga. Centro devocional y procesional (2006) y Los nombres de la Pasión (2009) y del número correspondiente de la colección sobre artistas, Modelino, con una monografía dedicada al escultor Juan Vega Ortega, titulada: El alquimista del Arte (2018). Igualmente ha sido coautor de obras como: Cofradías malagueñas rescatadas del olvido (2007), de la edición sobre la Historia de la Hermandad de Jesús El Rico (2014); El Monte Calvario. Historia, arte y devoción de Málaga (2018), Santa María de la Victoria. Devoción, historia y arte (2018) y El fulgor de un trono (2019). También ha colaborado en las monografías: Semana Santa en la provincia de Málaga (1991); Specvlvvm sine macula (2008); Los Patronos de Málaga, San Ciriaco y Santa Paula; Mena, Cien años de historia, cuatro siglos de devoción; y El Santo Cristo de la Salud, Patrón y Protector de Málaga (2019). Desde 1992 es miembro del equipo de redacción de la revista, La Saeta, donde ha publicado infinidad de artículos al igual que hiciera en la extinta colección de Cáliz de Paz y en Vía Crucis, órgano del Museo Diocesano malacitano. Perteneció a Pasión del Sur, donde, además de las colaboraciones habituales, redactó dos números extraordinarios: 100 curiosidades de la Semana Santa de Málaga (2015) y Cincuenta curiosidades de una procesión malagueña (2016). Asimismo ha colaborado en La Gaceta de Málaga, Diario 16, y en revistas y boletines especializados.

Banco de España, Málaga
Collectivité · Construcción del Edificio: 1933 - 1936

La Sede del Banco de España en Málaga es un edificio de estilo neoclásico situado entre el Ayuntamiento y la Antigua Casa de Correos, en el Paseo del Parque. Fue diseñado por el arquitecto José Yarnoz Larrosa y construido entre 1933 y 1936. Presenta tres plantas con un imponente pórtico hexástilo de orden corintio, acorde con la imagen simbólica y estable de una sede bancaria. Lo más destacado es el pórtico columnado, que preside el frente principal hacia el Parque, y representa el principal enlace con la arquitectura historicista. Remite a la idea de gran edificio público, tanto antiguo como contemporáneo.

Seco Velasco, Manuel
Personne · Sevilla, 10/07/1903 – 23/02/1991

Manuel Seco Velasco fue maestro en su oficio de orfebre y ha dejado numerosos discípulos diseminados por todos los talleres de este arte en la ciudad. Sus trabajos son de una gran calidad por la pulcritud de su realización, destacando entre ellos: el conjunto dorado del paso de la Virgen de Loreto, varales 1944 y respiraderos 1945; varales del Museo 1947; coronas: Refugio 1939, Loreto 1950, Desamparados 1954, Victoria 1974 y la de oro de la Virgen de las Angustias 1972. En plata, ángeles ceroferarios del paso de la Amargura 1951; a la Hermandad de la Trinidad, los trabajos de los respiraderos 1952 y varales 1960; faroles del Valle 1957, andas Calle de la Amargura 1963 y Coronación de Espinas 1974 Juegos de potencias en oro de las Tres Caídas de San Isidoro 1950 y Señor de la Salud (Gitanos) 1967. Puñales en áureo metal para la Virgen del Valle 1964 y Loreto 1972. Candelerías en plata de la Amargura 1940-1982, Macarena 1955 y Soledad de San Lorenzo 1960. Asimismo, numerosas insignias argénteas a la Macarena, Gran Poder y Soledad de San Lorenzo.
Estaba en posesión de la Cruz de Alfonso X El Sabio en 1949; premio Nacional de Artesanía; y en mayo de 1976 le fue concedida la Medalla de Plata con ramas de roble, al mérito del Trabajo.

Collectivité · Siglo XVI

El convento de La Trinidad, también conocido como convento de San Onofre de Padres Trinitarios Calzados, es un antiguo convento trinitario situado en el distrito Bailén-Miraflores de la ciudad de Málaga.
Unos sondeos arqueológicos realizados en 2009 revelaron que, bajo el suelo de un solar del convento, se hallaban los posibles restos del campamento real de Isabel La Católica que se sabe que se ubicó en este lugar, conocido entonces como Cerro de la Artillería, durante la conquista de la ciudad en 1487. Francisco Ramírez de Madrid, capitán de la artillería de las tropas castellanas, mandó edificar una ermita advocada a san Onofre, ya que el día de su festividad, el 12 de junio, fueron derribadas las torres que defendían el puente sobre el río Guadalmedina. Junto a la ermita fueron enterrados los soldados que murieron en el asalto. A pesar de que los Reyes Católicos ya habían cedido un convento a los frailes trinitarios que los acompañaban, este fue destruido por un terremoto en 1494. Los frailes entonces solicitaron que se les cediera la ermita de san Onofre y los terrenos colindantes, hecho que fue aprobado.
Los monjes se trasladaron y construyeron el convento actual, una edificación del siglo XVI alrededor del cual se originó el barrio de La Trinidad, a extramuros de la ciudad medieval. El primer monje en habitarlo fue Miguel de Córdoba, primo del Gran Capitán. Combina elementos arquitectónicos renacentistas y mudéjares. Destaca su claustro con arcos de medio punto y columnas de mármol. Las dependencias contaban con refectorio, portería, dormitorios, biblioteca, celdas y una zona para novicios. En el exterior se encontraban las oficinas, viviendas para los criados y jornaleros ganaderos, el comedor para el servicio, la cocina, el granero, un cobertizo para el ganado y la panadería, entre otros. También existía una gran huerta con árboles frutales y legumbres. La iglesia conventual contaba con reliquias de santos, una espina de Cristo, un trozo del sudario y un lignum crucis.
Los monjes habitaron en él hasta 1835, cuando la desamortización de Mendizábal les obligó a marcharse y se convirtieron en sacerdotes bajo órdenes del obispo.
Tras la marcha de los religiosos, el convento sirvió como cuartel del Ejército y la Guardia Civil, aunque la iglesia conventual continuó funcionando durante 16 años más, hasta que en 1853 fue convertida en un forjado, dormitorios y comedor para los militares. Rafael Rodríguez, el sacerdote que había mantenido la iglesia conventual funcionando tras la reconversión del convento, impulsó la construcción de la actual iglesia de la Trinidad, con el mismo nombre, y un convento para las monjas de Nuestra Señora de la Paz; ambos edificios fueron inaugurados en 1862 durante la visita de Isabel II a Málaga.
En el año 1974, los servicios policiales y de seguridad se marcharon del edificio y quedó abandonado desde entonces.

Santos Olivera, Balbino
Personne · Hospital de Órbigo (León) 27/03/1887 – Granada, 14/02/1953

Balbino Santos Olivera (Hospital de Órbigo, León, 27 de marzo de 1887 – Granada, 14 de febrero de 1953) fue un sacerdote católico español, obispo de Málaga y arzobispo de Granada. Cursó estudios en el Seminario Conciliar de Astorga, desde 1899, y más tarde, becado por la diócesis como colegial del Pontificio Colegio Español, en la Universidad Gregoriana de Roma, donde obtuvo los doctorados en Filosofía y Teología, y en el Instituto Bíblico de la misma ciudad, donde se licenció en Sagradas Escrituras y Lenguas Orientales. También asistió a la Academia de Santo Tomas y estudió otras materias, como arqueología, literatura o lenguas clásicas.
Ordenado presbítero en Roma el 23 de julio de 1911, regresó a España, siendo nombrado por el obispo de Salamanca su mayordomo y profesor del seminario de la diócesis, para pasar posteriormente a enseñar en la facultad de Teología como doctor de su claustro.
En 1919 fue nombrado canónigo de la catedral de Córdoba y en 1921 de la de Sevilla, en cuyo seminario enseñó diversas materias de su especialidad.
Recibió el encargo de la diócesis de Málaga el 5 de agosto de 1935, siendo consagrado obispo el 27 de octubre del mismo año en Sevilla por el cardenal Eustaquio Ilundáin y Esteban. Enfrentó el gobierno de la diócesis ante la difícil situación de la Iglesia católica en España. Durante la guerra se vivieron situaciones de tensión y violencia que produjeron el asesinato de seminaristas y sacerdotes, más de ciento sesenta, equivalente al 42 % de los incardinados, y la destrucción de templos. Su predecesor, Manuel González y García, había escapado de Málaga tras la quema de conventos de 1931, huyendo de las persecuciones, y nunca más regresó a la sede, que gobernó cinco años desde Madrid.
Al comienzo de la Guerra Civil, el 20 de julio de 1936, salió de Málaga a bordo del Silvia Tripcovich gracias a la ayuda del cónsul de Italia, Tranquillo Bianchi, junto al contingente de ciudadanos italianos que abandonó la provincia con destino a Tánger. Regresó con el control de Málaga tras la batalla de Málaga en febrero de 1937, encargándose de la reorganización de la diócesis tras la persecución religiosa sufrida y la tendencia laicista y secular precedente. A partir de ese año 1937, en las misas y demás actos litúrgicos celebrados en la ciudad tuvo lugar una mezcla de lo patriótico con lo religioso, e incluso era corriente ver a monseñor Santos Olivera saludando a la romana. Además, se implicó con la ayuda de Regiones Devastadas en la reconstrucción de numerosos templos y el palacio episcopal, que habían sido destruidos. Creó el Instituto Diocesano de Cultura Religiosa, fundó un seminario mayor de verano en Ronda y amplió el seminario de la diócesis.
Nombrado para encabezar la sede metropolitana de Granada el 24 de noviembre de 1946, desde su llegada desarrolló una intensan labor tanto apostólica como social. Durante su corto mandato de poco más de seis años, se crearon 42 nuevas parroquias, recorrió toda la diócesis en visita pastoral, intensifico la devoción a la Virgen de Fátima, promoviendo la construcción del santuario dedicado a esta advocación en Lancha de Cenes y publicó más de cincuenta pastorales. Su preocupación social se materializó con la recaudación de fondos para los más necesitados mediante tómbolas benéficas y con la entrega de viviendas sociales promovidas por la Constructora Benéfica de la Virgen de las Angustias, que presidía, en colaboración con el Instituto Nacional de la Vivienda. En 1950 organizó el Congreso Catequista Diocesano y convocó una misión general, cuya dirección encomendó a los jesuitas. En 1952 convocó el II Sínodo Diocesano, que no se celebraba desde 1572.
Amplió y mejoró los seminarios de la diócesis e impulsó el de verano de Sierra Nevada en el Hotel del Duque. Encomendó la dirección, administración y control de los seminarios a sacerdotes seculares diocesanos, desvinculando al seminario mayor de la Facultad de Teología de Cartuja, a la que permanecía ligado desde 1939, aunque mantuvo en la dirección espiritual a los jesuitas.
Falleció en Granada el 14 de febrero de 1953 y sus restos fueron inhumados en la capilla de la Virgen de las Angustias de la Catedral de Granada.

Parroquia de San Pablo
Collectivité · 1874 - 1891

La Iglesia de San Pablo es un templo cristiano católico del barrio de la Trinidad de Málaga. Es una obra del arquitecto Gerónimo Cuervo, construida entre 1874 y 1891.
La historia de la iglesia de San Pablo, corre paralela a la evolución urbanística de Málaga y más concretamente a la del barrio de la Trinidad, lugar de su asentamiento. Un barrio que surge en el siglo XVI, mediante una retícula lineal de traza arquitectónica y organizada a la sombra del camino de un campamento que se transforma en cuartel de la Trinidad. Sus terrenos contaban con fructíferas huertas, regadas permanentemente cuando el río de la ciudad recogía las aguas de la cuenca.
El origen concreto del tempo es algo confuso según las distintas fuentes de información existentes. Su resurgir inicial queda unido al desarrollo evolutivo del barrio trinitario. No se concibe como un monumento eclesial de grandes dimensiones, sino como una ermita que va a desarrollar sus cultos y a iniciar la base del fervor y devoción de un barrio humilde.
El 29 de junio de 1648, bajo el pontificado de Alonso de la Cueva y Carrillo, el Cabildo Catedralicio decidió convertir la ermita en ayuda de la parroquia de los Santos Mártires, de la que dependerá durante siglos. De esta fecha datan las fundaciones de las cofradías del Santísimo Sacramento, Nuestra Señora de la Concepción, de San Antonio Abad y de la Santa Cruz y Rosario. El 2 de abril de 1726, se declara oficialmente dependiente de los Santos Mártires, pero no es proclamada parroquia hasta 1833 por el prelado Juan José Bonel y Orbe.
De estilo neogótico el estilo arquitectónico de la obra responde al diseño original de Jerónimo Cuervo tras el encargo efectuado en 1873 el por entonces párroco Francisco Vega Gutiérrez. Entre la demolición de la antigua iglesia en precarias condiciones tras el terremoto de 1775 y la finalización de la nueva transcurrieron dieciocho años, siendo bendecida con gran solemnidad por el prelado malacitano Marcelo Spínola y Maestre. La nueva edificación supuso un punto de referencia para la evolución del barrio en cuanto a su crecimiento urbanístico y desarrollo popular. Destaca por ser la obra más monumental del barrio y por su alta torre. El arquitecto eligió el estilo neogótico para basar su proyecto por ser éste el más identificativo del eclecticismo del siglo XIX en Málaga y sobre todo por ser el que más libertad de diseño permitía, concepto que defendía apasionadamente desde la perspectiva del artista que busca la perfección y la gloria de su creación.
La fachada principal del templo se compone de una portada ornamentada ojival flanqueada por columnas a cada lado y pilares con detalles en relieve que surgen del zócalo de piedra. El arquitecto empleó estilo gótico para el rosetón, cuyo hueco inicial fue más bajo y con la incorporación del coro hubo que tapar y desplazar. Estos datos han sido conocidos al rehabilitar la pared interna y descubrir el trazo del rosetón y posterior relleno de su hueco, en la intersección con el plano del coro. El portón es de madera de caoba tallada, se corona con cresterías y pináculos adosados a los paramentos que aparecen sobre unos arcos ojivales escalonados y culminados por una cruz de gran tamaño. A cada lado del portón, se observan unos ventanales con acabados en ojiva.
El interior del templo consta de tres naves separadas por pilares fasciculados y arcos apuntados. En las cubiertas se hallan bóvedas de crucería. Sobre el altar mayor existe una girola de forma poligonal. En la parte inferior nos encontramos con el coro, formado por una balaustrada de yesería.
El templo nació en el siglo XVII como ermita de ayuda a la Parroquia de los Santos Mártires y en 1833 fue declarada parroquia. En 1873, se derribó el edificio para construir el actual, que se inauguró el 24 de mayo de 1891.
Saqueada en los sucesos de mayo de 1931, prácticamente la totalidad de su patrimonio fue destruido y la cripta profanada, siendo restaurada posteriormente.
En los años 2004-2006, se llevó a cabo una labor de restauración en el interior y el exterior del templo, reponiendo la mayoría de los pináculos, que se encontraban partidos.

Hermandad de Jesús Nazareno de San Juan
Collectivité · 1692 - finales del siglo XIX

La Hermandad de Jesús Nazareno se fundó en el año 1692 en la iglesia de San Juan. La imagen titular era una talla anónima malagueña de finales del siglo XVIII.
En 1716, el entonces Hermano mayor de la Cofradía del Santísimo Sacramento, D. Pedro Ponce, en nombre de la misma vendió a la Hermandad de Jesús Nazareno representada por sus Hermanos Mayores D. Cristóbal Rodríguez y D. Jacinto Bautista Villavicencio, parte de un solar de una casa aneja a la capilla del Santísimo para que pudiese labrar su capilla. La imagen de Jesús Nazareno ocuparía desde entonces el espacio correspondiente a la actual capilla bautismal de la Iglesia de San Juan.
Por descripciones de periódicos del siglo XIX hacía su desfile procesional en unión de las otras Cofradías existentes en la misma Parroquia de San Juan: Exaltación. Azotes y Columna, la Puente del Cedrón y Ntra. Sra. de los Dolores de la Archicofradía Sacramental de este título.
Se conoce que durante el siglo XIX procesionó ininterrumpidamente desde 1860 a 1866. Efectuaban su recorrido procesional con la finalidad del ejercicio de la Estación de Penitencia en la Catedral. A este respecto destacar que esta Hermandad se encontraba entre las privilegiadas que efectuaban su entrada al templo por la Puerta de la Encarnación y no por la Puerta de las Cadenas como hacía el resto.
Hacia finales del siglo XIX la Hermandad inició un periodo de decadencia que terminó en su total extinción. La imagen siguió recibiendo culto en su capilla hasta que en mayo de 1931, en el asalto a la Iglesia de San Juan, fue destruida.

Diario Málaga Costa del Sol
Collectivité · 1983 - 2006

El Diario Málaga-Costa del Sol fue un periódico español editado en Málaga entre 1983 y 2006. Nacido en la década de 1980, en el contexto de la aparición de nuevos periódicos, pronto se posicionó como un competidor del diario Sur. En la dirección del diario se encontraba Manuel Jiménez, contando con redactores como Manuel Mechant, Federico Cuberta o Álvaro Rodríguez. Llegaría a contar con una edición digital.​ En 2003 el diario fue adquirido por el grupo empresarial «Construcciones Salamanca». Dejó de editarse en octubre de 2006, tras la detención de su dueño —el empresario Emilio Rodríguez Bugallo— durante la llamada Operación Malaya.

Niños de la Providencia
Collectivité · c. 1741 - 1862

El origen de los Niños de la Providencia se remonta a la llegada a Málaga, en 1741, del maestro Felipe Antonio Montero que se dedicó a acoger a niños desamparados, dándoles alojamiento e instrucción en su casa de calle Re- fino. Al parecer este personaje vino reclamado por el padre Cristóbal de Rojas, y mantuvo en sus inicios estrechas relaciones con el Oratorio de San Felipe.
Los Niños de la Providencia fueron dotados de algunas rentas para paliar su precaria subsistencia y a depender de un Patronato que inicialmente ostentaba el cabildo municipal y administraba la Junta del Nuevo Pósito, institución que desde 1746 quedaría encargada también de su gobierno en detrimento del cabildo. A instancias del Consejo de Castilla sus constituciones se redactaron en 1769, y fueron aprobadas en 1773. La publicación del texto estatutario, carente de fecha y lugar de edición, incorporó en la portada un grabado calcográfico anónimo de la Virgen de los Dolores, que nos aporta una imagen gráfica de los Niños de la Providencia, vestidos con sotanilla negra y postrados de rodillas.
Por esta comitiva infantil, la Archicofradía de los Dolores pagaba un real por cada niño en 1836, cantidad que se duplicó años después, según consta en un impreso firma- do por Jorge Loring, como vocal depositario de la Casa de Socorro. El recibo está fechado el 28 de abril de 1856, tan solo diecisiete días después de que esta relevan- te figura de la burguesía malagueña hubiera recibido el titulo de Marqués de Casa Loring, por su labor humanitaria durante la epidemia de cólera, morbo que había asolado la ciudad entre 1854 y 1855.
Los cambios de denominación, e incluso de administración de institución encargada de velar por los niños huérfanos, se traslucen también en la documentación del Archivo de los Dolores. A partir de la Ley de Beneficencia de 1849, en 1862 se fusionaron las casas de socorro, providencia, expósitos y mendigos en una Casa de Misericordia que debía crearse en cada capital de provincia.

Casa de Misericordia
Collectivité · 1862

El origen de la Casa de Misericordia se remonta a la Ley de Beneficencia de 1849, que es la ley que posibilita que en 1862 se fusionen las casas de socorro, providencia, expósitos y mendigos en una Casa de Misericordia que debía crearse en cada capital de provincia. En el caso de Málaga, la institución estaba instalada en dependencias del antiguo convento de Santo Domingo, pasando luego por diversas ubicaciones hasta la construcción de un edificio nuevo junto a las playas de Poniente denominado, tras la Guerra Civil, Hogar Provincial Nuestra Señora de la Victoria y, desde 1988, Centro Cívico, destinado a actividades culturales de la Diputación Provincial.
La Casa de Misericordia no solo acogía a niños huérfanos, también a adultos en situación de extrema pobreza. En este sentido ofrecía también la participación de pobres en los cortejos fúnebres, como consta en los recibos impresos conservados en la Archicofradía de los Dolores.